Podemos comenzar comentando que no es un terreno técnico, no deja de ser ese terreno agradable, ancho o estrecho donde no hay ningún tipo de dificultad para apoyar el pie y es plano horizontalmente hablando, ya que desnivel siempre tendremos. Así que un terreno técnico es ese que nos va a hacer ir con más precaución, más despacio, cada pisada se ha de analizar y la respuesta de nuestro pie va a ser diferente.
Evidentemente, hay diferentes grados de terreno técnico, en cuanto a la dificultad podemos hablar que se pueden evaluar diferentes parámetros para catalogarlo como terreno más o menos técnico.
Terreno superblando
Podemos empezar por el más sencillo, que aunque técnicamente puede no parecer muy complicado, cada paso puede ser una sorpresa. Ese terreno arenoso, normalmente son campos de cultivo donde el camino puede no existir, podemos llamarlo en ocasiones campo a través, terreno blando que se hunde bastante a cada paso y que cada paso tiene una altura o profundidad diferente. El pie no solo se hundirá sino que se retorcerá hacia cualquier lado, poniendo al límite la resistencia de nuestros tobillos, donde un esguince de tobillo puede llegar en cualquier momento.
Terreno embarrado
Aunque la superficie de este terreno en su estado sólido no representaría ninguna dificultad, con la humedad de la noche o con las lluvias se vuelve una pista de patinaje. La zapatilla queda impregnada de barro y su peso se triplica, cada pisada puede deslizarse y son muy importante llevar un taco bastante prominente. Un despiste y estamos en el suelo, para nuestra suerte la caída puede llegar a ser leve.
Terreno rocoso
El terreno rocoso podemos diferenciarlo en dos tipos, el de rocas medianas o pequeñas y el de roca grande. El de roca mediana o pequeña es aquel que suele tener una pendiente de entre 0% y 10% y no combina únicamente diferentes tipos de tamaños de roca, sino que tener rocas fijas y rocas sueltas.
Es un terreno que en estado normal iríamos muy rápidos, que con una buena técnica mantendríamos la velocidad, pero hay que ir pendiente de donde pisamos, si la pisada es en roca, el pie no estará plano y podemos a gran velocidad encontrarnos con rocas sueltas que se deslizarán junto a nosotros dejando la posibilidad de caer.
El de roca grande, el desnivel es bastante alto, ese terreno solemos encontrarlos en las partes superiores de algunas cimas. Son piedras grandes dispuestas de forma aleatoria con puntos de apoyos casi nulos o muy separados. En subida nos hará trepar en bajada si está mojado puede llegar a ser muy peligroso.
Trialeras
Es una mezcla de todo lo anterior, pueden tener diferentes grados, desniveles de desniveles, pero no suelen ser pocos. Podemos encontrar barro, roca suelta, rocas grandes, incluso pizarra, son esas rocas planas y afiladas que un error y podemos llevarnos un buen corte en la pierna o en el tobillo.
Estos terrenos son bajantes de agua que ha ido confeccionando el terreno, por lo que puede que los puntos de pisada sean limitados, tengamos que entrar en la canalización o pasar por la parte superior, a su vez ir cambiando de lado. O tal vez en forma de «V» se haga difícil encontrar un punto de apoyo. El camino puede ser de roca o de tierra dura o suelta.
Deja tu comentario