planificar una rutaTanto si eres senderista y te gusta caminar plácidamente y disfrutar de las vistas como si te gusta la velocidad y eres trail runner te habrá surgido la necesidad de explorar nuevos lugares, zonas desconocidas con climas y retos diferentes. En esas circunstancias es importante saber cómo planificar tu ruta por lo desconocido, lo imprevisible.

Por este motivo es importante tener una pauta a seguir a la hora de diseñar nuestro recorrido. Y aquí te presento unos pasos de cómo planificar una ruta cuando vayas a descubrir un nuevo mundo por las montañas.

1 Hazte con un mapa de papel para planificar tu ruta

El primer paso es comprar en una librería, reservar en una biblioteca o que algún amigo te preste un mapa de papel. Por lo general estos mapas tienen un alto grado de fiabilidad, ya que técnicos y entendidos han recorrido / certificado el terreno y documentado correctamente cada sendero.

Su nomenclatura ha sido consultada y nos permiten ver de forma más genérica y amplia la zona al ser más grande que una pantalla y al verse las líneas o sombreado de relieve.

No todas las zonas tienen un mapa pero si mapas como los de la Editorial Alpina o Editorial Piolet no existen hay mapas del Instituto General de Cartografía. Una vez tengas la visión de la zona diseña una o dos posibles rutas. Planificar tu ruta te ayudará a seguir el camino.

2 Digitaliza tu ruta

El siguiente paso es pasarlas al ordenador. Existen decenas de webs que nos permiten dibujar nuestra ruta (Strava, Garmin, Wililoc, Adidas Runtastic…), también aplicaciones como BaseCamp de Garmin que permiten enviar las rutas a los dispositivos. Una vez dibujadas las posibles rutas tendremos parte de la información necesaria para evaluar si la ruta es compatible con nuestras necesidades y nuestro nivel.

Distancia, desnivel, tiempo o en algunas como Komoot te dirán la dificultad física y técnica pudiendo saber si se ajusta a nuestras características y si seremos capaces de realizar el recorrido.

3 Consulta los Mapas Online.

Las webs mencionadas anteriormente permiten ver el recorrido en Ortofoto (imagen) y webs como Google Maps o Google Earth con Street View nos permite en algunas zonas visualmente. De esta manera podremos ver cómo llegar al inicio, si podemos aparcar, si la ruta es transitable o si el camino existe aún. Nos dará una primera visión de que no nos vamos a quedar bloqueados sin pasar.

4 Busca tu ruta en Blogs

Hay blogs particulares o en las descripciones de rutas como Wikiloc donde se describe la ruta. Estas rutas sabes que han sido realizadas y la ruta no es inventada. Obtén información de la dificultad, posibles problemas o consejos que te puedan ofrecer los internautas. Seguramente habrá documentación gráfica que nos pueda hacer una idea del camino, del paisaje y sus dificultades.

Compara tu ruta y varíala si ves una posible dificultad o algún punto de interés que te pueda interesar ver o visitar. Mejórala a través de las rutas y descripciones de otros deportistas.

5 Llevate tu ruta

Una vez digitalizada la ruta definitiva pásala a tu reloj, GPS o móvil con mapas reales (ICC, Garmin, Alpina, Piolet) y así seguir la ruta durante el recorrido. Así evitarás perderte durante la ruta consultando el mapa o activando las alertas que te irán guiando o avisando en caso de equivocarte de camino.

6 Memoriza la zona

Es importante estudiarse y memorizarse el mapa a grandes rasgos, para orientarse por si necesitamos una alternativa en algún momento dado. Buscar y diseñar rutas alternativas puede ayudarnos a memorizar tanto la ruta que vamos a seguir como las posibles variaciones que podemos realizar, ya que siempre podemos encontrarnos con caminos desaparecidos, trazadas erróneas, zonas privadas, verjas que no teníamos presente, o simplemente nos equivocamos y decidimos seguir adelante.

También ayuda a tener la ruta digitalizada y poder seguirla, haber hecho variaciones y estudiado alternativas puede ayudarte. Pero recuerda que siempre podemos quedarnos sin batería, sin señal GPS, podemos sufrir un golpe en el dispositivo y no disponer del mapa por lo que llevar un mapa de papel o una copia del mismo siempre puede llegar a sacarnos de un apuro.